lunes, septiembre 12, 2005
Desacuerdo.
El humo cerca de mis ojos
El pecado de ayer quemándome los dedos
Cerca la mentira, que la puedo tocar.
Y me pregunto cuantos desechos rojos
Cuantos mecedores cuadrúpedos
Y aun así, buscando algo que buscar.
No me mires a los ojos, ni respires de mí.
Buscare el refugio de otros labios
Buscare borrarte, rescribiendo…
Quizás pierdo la línea de la que partí
La derrota se pinta de colores sabios.
Y pregunto si vivo cuando estoy muriendo.
Mucho tiempo en tan poco tiempo,
Bocanadas de labios que mordían
Que besaban mientras reían
Y aunque no hay nada para siempre
No comprendo el aferrarme a lo que siento
Si cada cual camina como en camino a madian.
Si el silencio nos une y desgarra castigando,
Al héroe mártir que fue degustando
Como de labios, manos frías, que mienten.
Guitarras, ojos apagados en el castigo,
Guitarras, muero por vivirte, porque te adoro
Música vacía, hueca que no canta,
Ese amor real que nunca fue real.
Ese idilio más que sano mendigo.
Cuéntame los pasos, el hilo de oro
La tierna esencia, la manta
Que los nervios son tuyos y son mal.
Mercancía seria el ser tu amigo.
Sereno.
Sereno.
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